Las ondas S (secundarioas o secundae) son ondas en las cuales el
desplazamiento es transversal a la dirección de propagación. Su velocidad es
menor que la de las ondas primarias. Debido a ello, éstas aparecen en el
terreno algo después que las primeras. Estas ondas son las que generan las oscilaciones
durante el movimiento sísmico y las que producen la mayor parte de los daños.
Sólo se transladan a través de elementos sólidos.
La velocidad de
propagación de las ondas S en medios isótropos y homogéneos depende del módulo de corte μ y de la densidad ρ
del material.